jueves, 27 de enero de 2011

Venus no nos quedaba tan lejos



Fue esa luz que se apagó tras tu despertar.

Fue la canción que sonó en la radio, en una habitación , cuando sonreiste la primera vez.

Fue mi fe... la que se desmontaba tras el muro de alabanzas y galanteo.

Te deje un suave insomnio y aguardiente, en forma de lagrimas, que no parabas de beber.

Sollocé cuando las agujas del reloj cortaron la respiración de dos inocentes en un juicio de moral. De testigos solo quedaron los sentidos, y bien sabes que poco podemos fiarnos de sus falsas coordenadas.

Tu viste que mi perfección era solo arena que se te metio en los ojos...Por eso esa noche no paraste de llorar...estuviste muy quieta y deseaste mimetizarte con un ambiente seco y torpe.

Podríamos haber desaparecido y quedar flotando como dos cuerpos abstractos en el paraíso... Pero yo decidí alimentar tus ansias de mentiras, y tú solamente quisiste volver a cubrir tus madrugadas con telares roídos y rojos. La dulce condena en el panteón de las Furias.

Venus no nos quedaba tan lejos...pero ni tú ni yo conseguimos los papeles de la inmortalidad.

Fue la lluvia, eyaculada por la tormenta, la que arrastró las buenas costumbres y la sinceridad tan cristalizada y fingida.

Fueron las margaritas del jardín que se empeñaron en mentirte con un "SÍ"; los que arrancaron las raíces bien asentadas de aquellos terrenos herméticos.

A mi me mintió la moneda cuando me salió cruz... ante la decisión de acercarme a tu deslustrada persona y a tus brazos tan tímidamente abiertos.

Dormí demasiado tiempo jugueteando con mi lengua en el ombligo de la importancia.

Fue la baja resolución con la que miramos las despedidas. No quisimos traducir las letras extranjeras del presente... Y ese complejo lenguaje iconográfico, esos posos del café, esos gestos desperdigados frente al espejo dijeron claramente que yo nunca fui un fin…. tan solo un medio.

Fue un papel verde brillante, con el que se envolvió mi poesía y mi lucidez, para que no vieran que el Sol alumbraba otro lugar.

Venus no nos quedaba tan lejos... y decidimos quedarnos cada uno en su esquina…

...Ese fue el fallo.


4 comentarios:

  1. Me ha gustado mucho, es muy tuyo, una historia de "amor sangrante" con un final poco esperanzador.
    Para no perder costumbre, la frase que mas me ha gustado: "esos gestos desperdigados frente al espejo dijeron claramente que yo nunca fui un fin…. tan solo un medio."
    Después de tanto tiempo sin renovar, da gusto volver a leerte.
    1 beso
    Natalia

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  2. p.d. me gusta mucho el nuevo aspecto, solo voy a poner un pero ... la letra del título del blog no es de mi agrado
    Natalia

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  3. Un placer leerte, como siempre...Al amor siempre le acompañan los sentidos como testigos, menos mal.
    "De testigos solo quedaron los sentidos, y bien sabes que poco podemos fiarnos de sus falsas coordenadas", me encanta.

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  4. Me encanta.
    Lo pondré en mi facebook, pero ya no te veo en él, has desaparecido.
    Tienes ese don, como los magos.
    Por si algún dia kieres leerme
    http://viannna.blogspot.com/2010/04/soy-inanguantablemente-humana.html

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